Detenidos por robar comida en pequeñas cantidades purgan penas de hasta 10 años en cárceles de todo el país, a pesar de que dicho delito no se encuentra tipificado

AGENCIAS

MÉXICO.- Actualmente hay alrededor de cinco mil personas encarceladas y pagando sentencias de hasta 10 años de prisión por haber robado un poco de comida en alguna tienda, un mercado, un restaurante o en una plaza comercial; sin embargo, este delito aún no está tipificado.

A este tipo de ilícito se le conoce como “hurto famélico” y generalmente es cometido por personas de escasos recursos, que no tienen dinero para satisfacer sus necesidades básicas.

Lo que pocos saben es que en el Código Penal no se habla en específico de este tipo de acción y es ubicada por las autoridades solamente como robo sin ahondar en la particularidad del caso.

A eso se suma que quien roba por hambre no tiene acceso a una defensa adecuada, debido a su pobreza, y la corrupción de los ministerios públicos para inflar sus estadísticas de combate al crimen, provoca que haya miles de reos sólo por robar comida.

Verónica Delgadillo y Jorge Álvarez Maynez, de Movimiento Ciudadano, quienes presentaron una iniciativa para reformar el Código Penal Federal en materia de robo por necesidad, mencionan que existen casos de sentencias excesivas, “como condenas de seis meses de cárcel y una multa de cuatro mil pesos por un daño de 105 pesos, una condena de tres años y una multa de 13 mil pesos por un robo valuado en 133 pesos, y el caso de una persona con discapacidad que estuvo encarcelado un mes por robar dos manzanas y un refresco con un valor de 21 pesos”, señalaron.

En su propuesta expusieron que el robo por necesidad puede quedar libre de sanción siempre y cuando no sean utilizados medios violentos, no se recurra al engaño, que éste sea por una sola ocasión y que los objetos robados sean indispensables para cubrir una necesidad personal o familiar.