Decisiones como la cancelación del NAIM, el freno a la reforma petrolera y la estrategia contra el huachicol podrían generar desconfianza en los mercados, considera

AGENCIAS

MÉXICO.- El Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP) advirtió que, diversas decisiones tomadas por el gobierno federal como la cancelación del aeropuerto de Texcoco, el freno a la reforma petrolera y la estrategia de combate al “huachicol” inciden en el factor confianza, y pueden limitar el dinamismo económico para este año y 2020.

“Es claro que en un entorno como este es poco probable que la economía muestre un dinamismo importante este año y quizá el siguiente. La probabilidad de que los pronósticos (económicos) se sigan ajustando a la baja es alta. No será hasta que los mercados perciban señales más favorables en temas como la evolución del gasto público”, manifestó el CEESP en su análisis semanal.

En un contexto de ajustes a la baja para la economía mexicana por parte del Bank of America Merrill Lynch y el Fondo Monetario Internacional (FMI), que han generado cuestionamientos por parte del gobierno federal, analistas del sector privado sostuvieron que, “pareciera que las autoridades no tienen un escenario claro de la coyuntura y de los efectos que esta pueda generar”.

En su análisis semanal, el CEESP recordó que la cautela para invertir en el país incrementó desde la cancelación del aeropuerto de Texcoco, situación que ha continuado con la propuesta de proyectos sin estudios de rentabilidad económica y social, como el Tren Maya y las pistas de Santa Lucía.

A esto se suma la estrategia del gobierno en contra del robo de combustible, que implica el transporte de combustibles a un costo 14 veces mayor, la compra de 670 camiones para agilizar la distribución, así como la afectación productiva de los estados afectados por el desabasto de gasolinas.

“Es claro que el balance de riesgos se ha deteriorado y eso sin duda será monitoreado por los capitales nacionales e internacionales. Si bien esto no significa que dejarán de fluir capitales hacia el país, si se puede esperar una mayor cautela, lo que implica que los flujos de capital pueden ser menores, limitando la actividad productiva, que significaría una menor generación de empleo”, sentenció.