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LONDRES.- Un equipo de científicos chinos ha dado un paso importante en la búsqueda de una cura para la diabetes tipo 1. En un estudio reciente, publicado en la revista Cell, lograron que una mujer de 25 años, tras un trasplante de células madre, comenzara a producir insulina nuevamente. Dos meses y medio después del procedimiento, la paciente pudo consumir azúcar sin complicaciones.

Este avance es significativo porque las células madre utilizadas fueron extraídas del propio cuerpo de la paciente, lo que reduce la necesidad de inmunosupresores. Estas células madre fueron convertidas en islotes de Langerhans, los cuales producen insulina en el páncreas.

La diabetes tipo 1, que generalmente aparece durante la adolescencia, ocurre cuando el sistema inmunitario ataca a las células del páncreas responsables de producir insulina. Hasta ahora, los pacientes necesitaban inmunosupresores para evitar estos ataques, pero con este tratamiento, se espera eliminar esa necesidad.

Aunque el estudio representa un gran avance, aún queda camino por recorrer. Se han realizado ensayos con células madre de donantes, con resultados prometedores. En algunos casos, los pacientes comenzaron a producir insulina de forma normal tras el trasplante.

Si bien aún no hay cura para la diabetes tipo 2, los avances en la manipulación de células madre ofrecen esperanza para el futuro de ambos tipos de diabetes.