Urge replantear estrategias, ante la ‘fatiga del destino’ por la falta de diversificación de la oferta de sol y playa, la creciente carga de impuestos a visitantes, la sobreoferta de cuartos hoteleros, problemas de seguridad y los conflictos entre taxistas y plataformas digitales que se han viralizado en redes 

SALVADOR CANTO / EQUIPO DE INVESTIGACIÓN DE EL DESPERTADOR DE QUINTANA ROO

La falta de diversificación en la oferta turística, limitada al concepto de sol y playa, que se ha postergado por muchos años en el Caribe Mexicano, una creciente carga de impuestos que se cobra a los visitantes y que encarece cada vez más sus estadías en los destinos de Quintana Roo y una sobreoferta de cuartos hoteleros, aunado a problemas en materia de seguridad que van de la mano con un conflicto entre operadores irregulares de taxi y de plataformas digitales en el Aeropuerto Internacional de Cancún (AIC) que han trascendido a nivel mundial a través de las redes sociales, han propiciado la denominada “fatiga del destino” que conduce a los turistas a considerar otras opciones de viaje, cuyos resultados comenzaron a reflejarse con una temporada mucho más baja de lo esperado en el pasado periodo de verano 2024.

Desde el Centro de Investigación Avanzada en Turismo Sostenible Anáhuac Cancún (STARC, por sus siglas en inglés) se advierte que existen elementos suficientes que han coadyuvado a un severo descenso en la llegada de turistas nacionales y extranjeros.

Francisco Madrid Flores, director de STARC, afirma que, si bien se tuvo una muy buena temporada invernal, el verano pasado registró una desaceleración, incluso con una caída que debe ser analizada por los empresarios del ramo y las autoridades.

Considera que la ralentización de la llegada de turistas a los destinos de Quintana Roo procede de un efecto de fatiga y hartazgo, por encontrar “siempre más de lo mismo”.

Además, agencias de viajes revelaron que en la temporada de verano de este 2024, Playa del Carmen, Cancún y Tulum dejaron de ocupar los tres primeros puestos como destinos favoritos de los mexicanos, al ser desplazados por Nuevo Vallarta y Puerto Vallarta, en la región de Bahía de Banderas; Los Cabos, Baja California; Puerto Progreso y Sisal, en Yucatán.

El propio titular de la Secretaría de Turismo (Sectur) en el estado, Bernardo Cueto Riestra, dio a conocer que ya se trabaja en la elaboración de un análisis de la baja afluencia de viajeros al Caribe Mexicano durante el verano pasado. “Desde luego que es un tema para ocuparse, pero no para alarmarse”, minimizó el funcionario.

Es de destacarse que durante la administración federal que encabezó Andrés Manuel López Obrador, uno de los reclamos constantes del sector turístico fue precisamente que el turismo dejó de ser una prioridad, y prueba de ello fue la desaparición del Consejo de Promoción Turística, así como el limitado apoyo para la participación de los destinos turísticos del país en ferias internacionales, que siempre han sido una eficaz ventana de ventas al mayoreo para la oferta turística de México.

Además, se incumplió con el traslado de la Secretaría de Turismo a Chetumal, como se había prometido dentro de un plan de descentralización de dependencias federales.

No menos importante es el hecho de que la zona hotelera de Cancún, la joya turística de la entidad y del país, enfrenta un envejecimiento prematuro y sobredensificación que conlleva a la saturación de servicios públicos, tráfico y movilidad, los cuales dañan la experiencia de los turistas.

A ello se suman los temas de crímenes ambientales y contaminación, así como la inseguridad propiciada por el «gigantismo» de zonas urbanas como la megalópolis entre Cancún e Isla Mujeres y la globalización de las crisis económicas y pandemias, entre otros riesgos constantes en detrimento del turismo.

Quintana Roo, 50 años: diversificación, el gran reto

El próximo 8 de octubre, Quintana Roo celebrará medio siglo como Estado Libre y Soberano, consolidado como la entidad turística más importante de México. Sin embargo, este liderazgo enfrenta múltiples desafíos, tanto internos como externos, que ponen en riesgo su posición privilegiada en el ámbito internacional. 

Uno de los principales desafíos es la diversificación de la oferta turística, un factor clave para garantizar la estabilidad y el crecimiento sostenido del sector. 

Actualmente, Quintana Roo depende en gran medida del turismo de sol y playa, lo que lo hace vulnerable a las variaciones en la demanda, las temporadas bajas y los cambios en las preferencias del turista global. Según datos del Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC), los destinos que diversifican su oferta pueden reducir hasta en un 40%, la estacionalidad –es decir, la fluctuación en temporadas altas y bajas–, logrando una mayor estabilidad a lo largo del año.

Una oferta turística más amplia permitiría atraer a diferentes tipos de visitantes, desde aquellos interesados en el ecoturismo y la cultura maya, hasta quienes buscan experiencias gastronómicas y de aventura. Esto no solo extendería la estancia promedio de los turistas, sino que también fomentaría su regreso. 

Por otra parte, en el contexto global, en los últimos 30 años el mundo ha enfrentado múltiples crisis económicas y sanitarias que han golpeado severamente a la industria turística. Las pandemias por gripe porcina (H1N1) y COVID-19 provocaron caídas históricas en la llegada de turistas. Una nueva crisis sanitaria podría ser devastadora para Quintana Roo, poniendo en riesgo los empleos y la infraestructura que sostiene a la industria sin chimeneas. 

Además, la creciente inestabilidad global por los conflictos armados, de los cuales hay 56 activos en el mundo, según datos presentados en el recién celebrado Foro de Turismo y Paz en el Caribe Mexicano, agravan aún más la situación. Este foro, organizado por la Universidad Anáhuac, destacó que 92 de los 193 países del mundo están actualmente involucrados en guerras fuera de sus fronteras, lo que genera un ambiente de incertidumbre que afecta al turismo internacional.

En este contexto global cada vez más complejo, Quintana Roo debe adaptar su modelo turístico para garantizar su resiliencia frente a futuras crisis. La diversificación de su oferta turística se presenta como la solución más viable para mitigar los riesgos inherentes a una industria altamente dependiente de factores externos.

Inseguridad y “acapulquización”, la gran amenaza 

Durante muchos años, el turismo de Quintana Roo ha sido una industria preponderante en la economía nacional, en virtud de que genera hasta el 50% del total de las divisas turísticas de todo el país y, sin embargo, la inseguridad se ha convertido en la gran amenaza para sus destinos.

Acapulco hoy padece los efectos del descuido de las autoridades por no haber atendido a tiempo el tema de la seguridad y en los últimos tiempos enfrenta una seria debacle turística; de hecho, desde el 2018 pasó de ser meca del turismo a capital de la violencia, al ser considerada la segunda ciudad más insegura del mundo, de acuerdo con un estudio de la ONG Seguridad, Justicia y Paz.

En Quintana Roo ese riesgo está latente y para el sector turístico representa su peor pesadilla: que destinos como Cancún, Playa del Carmen y Tulum se ‘acapulquicen’, porque todos los días se reportan hechos de violencia.

Según datos de la agencia de investigación TResearch, en Quintana Roo la cifra de homicidios anuales pasó de 193 en 2016, a 455 en 2017 y alcanzó su máximo en 2018, con 841 homicidios. Desde entonces, la cifra ha superado los 600 asesinatos cada año.

Señales de crisis deben ser atendidas: STARC

De acuerdo con el estudio más reciente presentado por la institución académica STARC Anáhuac Cancún, que dirige Francisco Madrid Flores, existen elementos suficientes que han coadyuvado a una severa baja en la llegada de turistas al Caribe Mexicano.

“¿Cuáles son los factores? Sencillo: la falta de promoción, el tema de inseguridad, fatiga de destinos, esfuerzo de la competencia, insuficiente oferta aérea en el mercado doméstico e incluso el tipo de cambio», expuso.

Consideró que, aunque no se perciba a simple vista, otro tema que puede complicarse en el mediano plazo y eventualmente para las empresas turísticas es que podría haber nuevas medidas laborales que compliquen los resultados, con las reformas a la Ley Federal del Trabajo pendientes de análisis en la nueva legislatura del Congreso de la Unión, que incluyen la reducción de la jornada de trabajo, el incremento de aguinaldo y la ampliación de los permisos de paternidad.

«Ese es el mensaje que nos queda, volatilidad y la desaceleración de la economía norteamericana, la agresividad de esfuerzo a los competidores y la propia complejidad de la conformación de la geopolítica mundial en donde coexistimos con escenas bélicas que de pronto no se rumorea, pero sigue habiendo guerra en Ucrania, el conflicto atípico en Medio Oriente y muchos otros temas», lamentó. 

Añadió que se pronostica una baja en la programación de vuelos y asientos en rutas desde Estados Unidos, con 7.4 por ciento menos asientos en comparación con el año pasado, que corresponden a 2.2 millones de septiembre a diciembre, y 5.7% menos vuelos, es decir, un decremento de 12 mil 166 conexiones aéreas.

Pese a esto, consideró que todavía no se da una «tormenta perfecta», pero sí puede haberla en los próximos meses; “hoy estamos viendo señales simplemente, que se deben atender».

Resultados de verano encienden las alertas

Las Asociaciones Hoteleras tanto de Cancún, Puerto Morelos e Isla Mujeres, así como la de Tulum, coincidieron en que al término de las vacaciones de verano 2024, los números los dejaron insatisfechos.

Las cifras registradas muestran que la ocupación promedio no superó el 70%, un resultado que preocupa a los actores clave del turismo en la zona.

Al respecto, Jesús Almaguer Salazar, presidente de la Asociación de Hoteles de Cancún, Puerto Morelos e Isla Mujeres, reconoció que hubo una caída significativa en las tasas de ocupación, con descensos de hasta el 15%. 

“En temporadas anteriores nos acostumbrábamos a ver ocupaciones del 90% durante el verano; es vital que reforcemos nuestras estrategias de promoción turística para atraer más visitantes y asegurar temporadas más exitosas en el futuro”, advirtió.

En tanto, David Ortiz Mena, presidente de la Asociación de Hoteles de Tulum, también reportó una temporada de verano baja, con ocupaciones que no superaron el 71%. 

El líder hotelero tulumense estimó que una de las posibles causas de esta baja ocupación es la falta de promoción institucional de México en los últimos años, especialmente frente a las agresivas campañas publicitarias de países competidores, particularmente en el Caribe. 

Sostuvo que la competencia global en el sector turístico está en aumento, con nuevos destinos emergentes y tendencias que captan la atención de los viajeros. 

Aunado a esto, comentó que Estados Unidos, principal mercado emisor para la región, está destinando importantes recursos para fomentar el turismo doméstico, lo que podría estar afectando la afluencia de visitantes internacionales a Quintana Roo.

Los cuartos hoteleros de los principales destinos de la zona norte del estado son: Cancún, 45 mil 909; Solidaridad, 46 mil 027; Tulum, 11 mil 617; Isla Mujeres, 10 mil 828 entre las zonas insular y continental; Puerto Morelos, 6 mil 643; y Cozumel, 4 mil 952. En total, de acuerdo con cifras de Sedetur a mayo del 2024, Quintana Roo integra mil 429 hoteles, con 133 mil 31 cuartos.

Violencia de taxistas y tarifas hoteleras afectan: consultoras

Entre las razones por las que los viajeros han optado por dejar de visitar el Caribe Mexicano sobresale el temor a ser víctimas de algún conflicto propiciado por taxistas locales, tanto en los hoteles como en el Aeropuerto Internacional de Cancún (AIC), en donde están enfrascados en una lucha contra las plataformas digitales, pues los casos de violencia se han incrementado en los últimos meses y difundido ampliamente en redes sociales, de acuerdo con un reporte de Mex-Travel y Go-Vacation!, reconocidas consultoras de viajes.

Destacaron que también influyen los costos de hospedaje hotelero, porque 35% de las personas que participaron en una encuesta consideraron que los precios de los hoteles Todo Incluido son excesivos, sobre todo en Cancún y la Riviera Maya.

Por esta razón el 81% afirmó que, con la experiencia de estancias pasadas y en caso de que decidieran viajar al Caribe Mexicano, se hospedarían en un Airbnb.

La mayoría de los encuestados estimó que, en promedio, se gasta hasta 60% más de presupuesto en un viaje de placer a Quintana Roo que a otros destinos mexicanos, como Acapulco, Los Cabos o Puerto Vallarta.

WTTC alerta reducción de estancia de turistas

En una reciente reunión con autoridades y empresarios del sector turístico de Quintana Roo, Julia Simpson, líder del Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC), alertó por una reducción en la cantidad de noches que los visitantes destinan para hospedarse con propósitos turísticos en la entidad, pues la duración promedio de la estadía pasó de 7.1 a 6.7 noches y las estancias más cortas, de una sola noche, están aumentando considerablemente.

Simpson resaltó que Quintana Roo se ha consolidado como un referente turístico a nivel mundial y que bajo el liderazgo de la gobernadora Mara Lezama ha alcanzado cifras históricas en el sector turístico.

Destacó que, si bien el estado presenta un crecimiento de 33% en la demanda de asientos premium frente a un avance de 7% en asientos de clases económicas, lo que indica un cambio hacia viajeros con mayor poder adquisitivo, es imperante buscar mayores alternativas de promoción para que el turismo cuente con mayores alternativas, que no solo sea sol y playa.

Sedetur analiza caída de afluencia 

Ante la baja turística en el verano pasado, Bernardo Cueto Riestra, titular de la Secretaría de Turismo (Sedetur) en el estado, dio a conocer que harán un análisis al respecto, aunque aseguró que “no es tan drástica” como han manejado algunos actores turísticos.

De entrada, el funcionario rechazó que la caída de viajeros represente un 8 por ciento como han dicho los hoteleros, lo que consideró una exageración; mencionó que, desde su punto de vista, en la baja afluencia pudo influir el retiro de aviones por mantenimiento, los recientes Juegos Olímpicos y la Eurocopa que atraen a muchos turistas, así como las próximas elecciones en Estados Unidos, pues por la incertidumbre política muchos de sus ciudadanos prefieren no viajar.

“Sí hubo una disminución de turistas en el verano, pero, por ejemplo, en 2023 cerró agosto con un millón 877 mil viajeros y este año ese mismo periodo concluyó con un millón 855 mil, es decir 20 mil vacacionistas menos, no 380 mil como se ha difundido”, expuso.

Reconoció que es “un tema para ocuparse, pero no para alarmarse”, pues hubo una disminución de 1.2% y por ello la Sedetur hará un análisis sobre este comportamiento del turismo en el Caribe Mexicano; afirmó que, como medida inmediata, se reforzará el esquema de promoción para cerrar con éxito el invierno 2024.

“Vamos a ir con todo a los próximos eventos internacionales, entre ellos uno que se celebrará en Londres, uno más en Brasil y finalmente una comitiva viajará a Argentina para seguir con la promoción del destino con miras a la temporada decembrina”, afirmó.

“Balazo al pie”, otorgar el 100% de DNR a Sedena

En lo que podría considerarse como un “balazo al pie” al turismo en México, a decir de representantes del sector, el gobierno federal remitió al Congreso de la Unión un Decreto para que el 100 por ciento de los recursos del DNR (Derecho de No Residente) sean asignados a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).

Ante esto, los hoteleros del Caribe Mexicano han reaccionado e informaron que ya preparan una contrapropuesta, pero que se la harán llegar a la nueva administración federal, porque la actual “ya está de salida y nos van a ignorar a pesar de que es un despropósito absoluto”, dijo Jesús Almaguer, presidente de la Asociación de Hoteles de Cancún, Puerto Morelos e Isla Mujeres.

La pretensión del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, en vísperas de concluir al momento del cierre de esta edición, es modificar la Ley Federal de Derechos para que el 100% del DNR se vaya directamente a las arcas de la Sedena, a fin de seguir financiando proyectos como los aeropuertos de Chetumal, Palenque, Tulum, el AIFA, Mexicana de Aviación y el Tren Maya.

El Cobro de DNR, de aproximadamente 717 pesos por persona, se hace a los turistas internacionales que ingresan al país por vía aérea, terrestre o marítima y originalmente estaba dirigido a acciones de promoción turística del país; sin embargo, a partir de la desaparición del Consejo de Promoción Turística de México (CPTM) este recurso se destinó al Tren Maya y ahora se pretende, mediante un nuevo fideicomiso, encauzarlo para financiar los proyectos de las empresas militares, organizadas bajo el Grupo Aeroportuario, Ferroviario y de Servicios Auxiliares Olmeca-Maya-Mexica (GAFSACOMM).

El gobierno estima que este año se recibirán más de 44 millones de turistas internacionales, lo que podría generar alrededor de 31 mil 800 millones de pesos que alimentarían las finanzas militares. 

Es de mencionarse que esta propuesta de decreto ingresó a la Cámara de Diputados una semana después de que los hoteleros y miembros del Consejo Consultivo de Turismo de Quintana Roo se reunieron con Josefina Rodríguez, quien llevará la estafeta de la Secretaría de Turismo Federal en la administración de Claudia Sheinbaum Pardo.

Ahí le plantearon la urgente necesidad de contar con un plan muy definido y recursos directos de promoción para la marca México, pues, le explicaron, “sin promoción no habrá competitividad y los efectos se reflejarán en el corto y mediano plazo frente a la competencia voraz que sostienen todos los países”.

A nivel nacional, la Asociación Mexicana de Hoteles y Moteles (AMHM) ya ha propuesto, a través de un comunicado firmado por su presidente, Miguel Ángel Fong González, que dicha reforma contemple la participación de por lo menos el 50% del DNR para la promoción turística de México. 

Impuestos a turistas, por montón

En México hay 14 estados que cobran el Impuesto al Hospedaje, pero los montos recaudados no son aplicados de manera directa en la promoción turística, informó la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicio y Turismo (Concanaco-Servytur), de acuerdo con un reciente diagnóstico.

En el caso de Quintana Roo, este recurso permite contar con un Consejo de Promoción Turística de Quintana Roo (CPTQ), que se emplea para la difusión de los 12 destinos turísticos.

Sin embargo, existen otros cargos adicionales como Impuesto Sobre la Renta (ISR), Impuesto al Valor Agregado (IVA) y el VisiTAX, que es una tarifa establecida en 2020 por el Estado para mitigar el impacto en las playas y reservas naturales del Estado y contener el sargazo. También se utiliza para generar infraestructura destinada a mejorar el acceso y vigilancia de los sitios arqueológicos mayas y generar mejores servicios públicos que beneficien tanto a los turistas como a la población local.

Además, a partir del 1 de enero de 2025 se comenzará a cobrar un impuesto de cinco dólares por cada crucerista que visite los puertos de Quintana Roo, conforme a un acuerdo firmado entre el Gobierno del Estado y la Florida-Caribbean Cruise Association (FCCA).

Desde el 1 de abril de 2021, los turistas mayores de 15 años pagan un impuesto para generar ingresos para crear empleos y financiar nuevas atracciones turísticas establecidas como Impuesto Sobre la Nómina (ISN).

Este 2024, el ISN en Quintana Roo es del 4%, el Impuesto Sobre el Hospedaje es del 5% en general y del 6% para plataformas digitales, pero adicionalmente los pasajeros que utilizan servicios de transporte marítimo en Cancún deben pagar el Impuesto de Muelle, también conocido como la Sobretasa de Muelle y Saneamiento.

Esta situación ha sido señalada reiteradamente por el sector hotelero del estado, que considera que la abundancia de impuestos desincentiva a los viajeros y lo pone en desventaja frente a otros destinos del Caribe, como República Dominicana y Cuba.

Cancún Travel Mart, una ventana de alivio 

Con el objetivo de generar más promoción en una sana competencia para incrementar la llegada de turistas, luego de la baja que se reportó en la temporada de verano, Cancún será sede de una edición más del Travel Mart del 23 al 25 de octubre, en donde el sector hotelero del Caribe Mexicano tiene agendadas más de tres mil citas de negocios, con las cuales espera concretar más de cinco mil millones de dólares en ventas.

Jesús Almaguer Salazar, presidente de la Asociación de Hoteles de Cancún, Puerto Morelos e Isla Mujeres, detalló que para este evento se ha confirmado la asistencia de 163 empresas, 85 compradores y 78 proveedores de 21 países.

En esta feria estarán presentes los 12 destinos del Caribe Mexicano –Holbox, Isla Mujeres, Cancún, Playa del Carmen, Tulum, Riviera Maya, Maya Ka’an, Chetumal, Bacalar, Puerto Morelos, Cozumel y Mahahual– para promocionarlos, en un encuentro al que acudirán representantes de Estados Unidos, Canadá, Colombia, Costa Rica, Argentina, Chile, China –un mercado en crecimiento– y varios países de Europa, como España, Suiza y Portugal.

Otro de los retos será negociar el incremento de las tarifas hoteleras, entre 8% y 10%, para las próximas temporadas; por ello, se vuelve fundamental la realización del evento en estas fechas, previo al invierno y el arranque de 2025.

Se trabaja para diversificar la oferta turística: Mara Lezama

En el marco del Día Mundial del Turismo, que se conmemoró el viernes 27 de septiembre, la gobernadora Mara Lezama Espinosa, frente a cónsules, académicos, hoteleros, restauranteros y estudiantes del sector turístico que asistieron a la Expo Cancún “Unidos por el Turismo y la Paz” en el hotel Fiesta Inn de Cancún, expuso que la Secretaría Estatal de Turismo, en colaboración con la Secretaría de Turismo de Benito Juárez y otros municipios, trabajan para diversificar la oferta turística más allá del tradicional sol y playa. Este esfuerzo incluye promover la cultura y ayudar a los visitantes a descubrir las bellezas naturales y la rica historia del estado, siempre bajo un enfoque sostenible, subrayó.

La gobernadora resaltó la importancia de la colaboración, la innovación y la sostenibilidad en el sector turístico para combatir la desigualdad social, de acuerdo con el Nuevo Acuerdo por el Bienestar y Desarrollo de Quintana Roo que impulsa, promoviendo una Nueva Era del Turismo que permita la inclusión de todos y se refleje en prosperidad compartida para trabajadores del sector, artesanos y habitantes de las comunidades rurales.

*** APUNTES DE EL DESPERTADOR ***

Para contrarrestar los efectos negativos de las distintas circunstancias que conllevan a la ‘fatiga del destino’, las autoridades gubernamentales pueden implementar las siguientes estrategias, con el concurso del sector turístico privado:

A corto plazo

1.- Mejorar la infraestructura turística (renovación de hoteles, restaurantes, etc.).

2.- Ampliar y diversificar la oferta de actividades y experiencias.

3.- Implementar programas de descuento y promociones.

4.- Mejorar la señalización y orientación en lugares turísticos.

5.- Aumentar la seguridad y vigilancia en zonas turísticas.

A largo plazo

1.- Desarrollar un plan de marketing y promoción turística efectivo.

2.- Invertir en la formación y capacitación del personal turístico.

3.- Fomentar la innovación y la creatividad en la industria turística.

4.- Proteger y preservar el patrimonio cultural y natural.

5.. Establecer alianzas con otros destinos turísticos.

Estrategias de sostenibilidad

1.- Implementar prácticas sostenibles en la industria turística.

2.- Reducir el impacto ambiental del turismo.

3.- Fomentar la responsabilidad social y ambiental.

4.- Promover la economía local y el comercio justo.

5.- Establecer indicadores de sostenibilidad turística.

Estrategias de innovación

1.- Incorporar tecnología para mejorar la experiencia turística.

2.- Desarrollar productos y servicios turísticos innovadores.

3.- Fomentar la creatividad y la innovación en la industria turística.

4.- Establecer programas de incubación y aceleración para empresas turísticas.

5.- Promover la colaboración entre sectores públicos y privados.

Estrategias de participación ciudadana

1.- Fomentar la participación ciudadana en la planificación turística.

2.- Establecer mecanismos de retroalimentación para los turistas.

3.- Promover la educación y la conciencia turística.

4.- Fomentar la responsabilidad social y ambiental.

5.- Establecer programas de voluntariado turístico.