Por el Queso de Bola

El “circo romano” y la “caja china” fueron instrumentos que antaño se utilizaron como distractores para mantener al pueblo desvinculado de la realidad; que se entretuvieran para que no reclamaran la mala gestión del gobernante en turno. Bueno, los romanos y los priistas fueron expertos en utilizarlos, por eso duraron tanto tiempo en el poder.

Los priistas, por ejemplo, tenían la “escuelita del portafolio”: los iniciados en la política cargaban el portafolio del político experimentado, acompañándolo a todas partes, lo que les permitía conocer de primera mano cómo se actuaba en diversos escenarios; con el paso del tiempo, afinaban esos conocimientos hasta convertirse también en maestros y, así, el ciclo se repetía. 

Pero como siempre sucede, hay prófugas del aprendizaje con la peregrina idea que, coleccionar logotipos de partidos políticos en los que brevemente han estado, los convierten en expertos por ósmosis inversa en el manejo de distractores.

Lo anterior viene a colación porque, se dice, se rumora y se comenta que la presidenta municipal del Ayuntamiento de Solidaridad, Estefanía Mercado, tiene la intención de cambiarle el nombre al municipio, ya no sería Solidaridad, por aquello de la reminiscencia del gobierno de Carlos Salinas, otrora innombrable, y en su lugar rebautizarlo con el nombre de la ciudad cabecera del municipio, es decir, Playa del Carmen.

Entre las razones a favor se aduce que Playa del Carmen es más conocido que el de Solidaridad y el cambio de nombre podría ayudar en la promoción turística. 

Si a esas vamos, ya sabe, ocurrencias, mejor utilizar Playa del Crimen, es más conocido y acorde con la realidad, todo mundo la conoce de dicha forma.

Si la intención de cambiar el nombre para erradicar la génesis priista que conlleva, ¡par favar!, la mayor parte del gabinete de Solidaridad son expriistas; vaya pues, hasta la propia Estefanía tiene ADN tricolor. El convertirse a la 4T, sea por convicción o por conveniencia, no elimina en automático las malas mañas ni la genética.

Pero bueno, ya que estamos en eso de las ocurrencias, y aunque nadie me hará caso, yo propongo cambiar el nombre de Solidaridad por el de «la Xibalbá Caribeña», o sea, lugar de miedo, el inframundo pues (según San Google, traduciendo del maya quiché), tal y como es ese municipio, ¿les gusta? En fin, ese será rollo de los que viven en el municipio de Solidaridad y de los diputados (tendría que cambiarse la Constitución), pero en los tiempos de la 4T todo es posible.

Afortunadamente para nosotros los cancunenses, Benito Juárez fue la referencia histórica de papá AMLO, así que nuestro municipio seguirá llamándose así, salvo que doña Ana Paty copie la idea. Pero no creo, con los baches tiene para entretenerse.

Gira la pirinola y doña Estefanía Mercado se lleva una frase de promoción turística… ¡Bienvenidos a la Xibalbá Caribeña!