Canto del Gallo
¿A qué se refiere López Obrador al afirmar que su gobierno representa la cuarta transformación de México? ¿Y las tres anteriores, cuáles podrían ser?
Hay una hipótesis que podría ser el referente de las tres épocas, tres cambios o tres eventos anteriores en la historia de nuestro país: presumimos que AMLO pensó en el movimiento de Independencia iniciado por Miguel Hidalgo como la primera, a la Reforma de Benito Juárez como la segunda, y a la Revolución de Madero y los caudillos, Villa en el Norte y Zapata en el Sur, como a la tercera; entonces Morena y su gobierno con Juntos Haremos historia sería la cuarta, una analogía correcta siempre y cuando AMLO logre los resultados históricos que proclama: “Quiero pasar a la historia como un buen presidente”. Es grande su aspiración y hemos escuchado sus compromisos transformadores con atención, entre ellos la descentralización de las secretarías de Estado, no usar el avión presidencial ni guaruras, no más gasolinazos, erradicar la corrupción y la impunidad, sacar de la pobreza a millones de mexicanos y muchos más, que ya veremos en la realidad hasta dónde será posible aterrizarlos, en esta autodenominada cuarta gran transformación.
Lo que es verdaderamente impresionante y hay que otorgarle el beneficio de la duda, es el hecho de asumirse y compararse con los grandes mexicanos que han protagonizado nuestra historia en las primeras transformaciones. Es menester observar que todas se han dado en México en periodos más allá de seis años, y en este caso los compromisos asumidos con el pueblo son muy muy grandes, aun en pleno siglo XXI, en el cual la globalización, la comunicación digital y la tecnología de las redes sociales hacen que la historia real parezca un juego de niños. Los avances en la evolución del pensamiento y del desarrollo humano parecen haber dejado la percepción de que la pobreza extrema y las regiones marginales del país no son reales, como si formaran parte de un juego virtual, y por lo tanto cobra especial interés su proclama: «Por el bien de todos, primero los pobres”. Millones  de mexicanos votaron por un verdadero cambio, muchos aún están emocionados por lo logrado con este triunfo que ojalá no se convierta en una transformación virtual. Como dice doña Esa: «A AMLO lo cuidará la gente pero sin apachurrar». Muchísimo cariño, muchísimo amor. Me caigo al mar.

La pregunta que ni se pregunta

¿De casualidad alguien sabe que lambiscón (na) la cagó permitiendo que el presidente López Obrador quede mal, dando falsamente como un hecho la participación del Papa Francisco en los foros para pacificar a Mexico? ¿Ya vamos a comenzar? Como diría doña Esa: «Yo no me llevo ají contigo misho, te voa tumbá tré diente».