MÉXICO.- El vapor del cigarrillo electrónico aumenta la producción de químicos inflamatorios y desactiva los macrófagos alveolares, células protectoras que engullen y eliminan las partículas de polvo, bacterias y alérgenos que han eludido las otras defensas mecánicas del tracto respiratorio, por lo que son la última barrera para mantener los espacios libres de partículas potencialmente dañinas, indica un estudio de investigadores de Reino Unido y EEUU.