En Bacalar, un edificio abandonado se ha convertido en un símbolo de misterio y nostalgia. Popularmente conocido como el «hotel abandonado», su nombre original es Hotel Laguna, un antiguo establecimiento que, décadas atrás, representó el esplendor del turismo en la región.

Construido entre las décadas de 1970 y 1980, el Hotel Laguna fue uno de los primeros grandes alojamientos de Bacalar, ofreciendo vistas privilegiadas de la icónica Laguna de los Siete Colores. Este sitio emblemático fue, en su momento, un refugio para turistas que buscaban disfrutar del paraíso natural que caracteriza a la región. Sin embargo, problemas administrativos y económicos marcaron su destino, llevando al cierre de sus puertas y al abandono que hoy lo define.

El deterioro del edificio ha hecho de él un atractivo para fotógrafos y exploradores urbanos, quienes buscan inmortalizar su estructura y su atmósfera cargada de nostalgia. A su alrededor, no faltan las historias de fantasmas y leyendas locales que alimentan su fama como un lugar intrigante.

Aunque han surgido propuestas para su restauración y reapertura, ningún proyecto se ha concretado hasta ahora. Para Bacalar, el Hotel Laguna es un recordatorio de su pasado turístico y un lienzo en espera de un nuevo capítulo que revitalice su historia.

Para locales y visitantes, este edificio enigmático no solo es un lugar para contemplar, sino también una invitación a reflexionar sobre el potencial de rescatar espacios que forman parte del legado cultural y turístico de la región.