Tener mascota se ha asociado en varias ocasiones con beneficios para la salud, especialmente a nivel de apoyo psicológico. Ahora una encuesta publicada en Estados Unidos asegura que tener gato puede tener beneficios para la salud. Según los datos publicados en el estudio Monthly Healthy Minds en 2023, el 86% de los encuestados aseguraron que sus gatos tienen un impacto positivo en su salud mental.

De entre ellos, el 69% de los dueños de gatos dijeron que sus mascotas les ayudan a reducir el estrés y la ansiedad, para otro 69% les proporciona amor y compañía y un 66% aseguró que los considera una presencia tranquilizadora. 

La interacción con gatos estimula la liberación de hormonas como la oxitocina, conocida por generar sensaciones de bienestar y fortalecer los lazos emocionales. Además, tener un gato puede ayudar a reducir los síntomas de la depresión y fomentar una actitud más positiva ante la vida. El simple acto de acariciar a un gato desencadena la liberación de endorfinas, que elevan el estado de ánimo y generan una sensación de felicidad.

«Los estadounidenses reconocen claramente que nuestras relaciones con nuestras mascotas pueden tener beneficios notables para nuestra salud mental en general», aseguró la doctora Rebecca Brendel, presidenta de la Asociación Estadounidense de Psiquiatría (APA), responsable del estudio.

Este estudio estableció también que presuntamente los dueños de gatos tenían un menor riesgo de muerte por causas naturales, especialmente en relación con enfermedades cardíacas, debido a niveles más bajos de colesterol. Del mismo modo, aseguró que mantener juegos y hacer ejercicio con el animal, aunque no requiera paseos como ocurre con los perros, podría tener beneficios a nivel cardiovascular.

Se ha establecido que el ronroneo característico de los gatos tiene un efecto relajante en las personas, ayudando a reducir la ansiedad y el nerviosismo. Este sonido de baja frecuencia, además de ser reconfortante, se ha asociado con la reducción de la presión arterial y el ritmo cardíaco. De hecho, un estudio anterior, publicado por la Universidad de Minnesota, encontró que los dueños de gatos tienen un 30% menos de probabilidades de sufrir un ataque cardíaco en comparación con aquellos que nunca han tenido uno.