Jugando fuera de las reglas y los tiempos electorales, figuras destacadas del Partido Verde, incluyendo algunas polémicas por su involucramiento en escándalos como el del “Cártel del Despojo”, ya mueven sus fichas en busca de extender su control en el estado, sin descartar un posible rompimiento con Morena con miras al 2024

SALVADOR CANTO

A pesar de que todavía falta más de un año para el próximo proceso electoral, figuras destacadas del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) en Quintana Roo, incluyendo algunos integrantes del “Cártel del Despojo” denunciado en el 2021 por el portal Latinus, han comenzado a mover sus fichas con la intención de mantener el control de algunos municipios y hacerse de otros a costa de lo sea, incluida una posible ruptura con Morena (Movimiento de Regeneración Nacional), pues en algunas entidades del país en donde en el 2023 habrá elecciones, esa alianza nacional ya tiene fricciones.

Acostumbrados a violentar las leyes electorales, pues este ha sido su modus operandi durante los últimos 20 años bajo el amparo de la impunidad que le proporcionó su entonces aliado, el Partido Revolucionario Institucional (PRI), al que terminó traicionando, ahora hacen lo mismo pero con el cobijo de su principal socio, Morena.

Hace tres semanas la empresaria Erika García Deister, directora general de Cancún Cards, una empresa dedicada a la venta de tiempos compartidos, quien es madre del exdiputado verde ecologista Gustavo Miranda García —ambos vinculados al “Cárcel del Despojo”—, dio a conocer que firmó un acuerdo con el jugador de Pumas y seleccionado de Brasil Dani Alves para que, a través de su fundación, se beneficie a niñas y niños de siete a 17 años en situación de vulnerabilidad del municipio de Benito Juárez, un anuncio que podría enmarcarse como un acto anticipado de campaña en busca de promover a su hijo.

Lo anterior, debido a que en entrevistas con radiodifusoras locales y nacionales, García Deister ha expuesto que ella y su hijo tienen la idea de iniciar caravanas culturales en distintos puntos de la ciudad para dar a conocer el proyecto emprendido con el jugador de futbol, con el argumento de que quieren devolverle al destino “parte de lo mucho que le han dado”.

De acuerdo con miembros del PVEM, a pesar de que en estos momentos Gustavo Miranda García está “apagado” dentro de la escena política, tras su salida con más pena que gloria de la XVI Legislatura del Congreso del Estado, es su propia madre quien ya lo está promoviendo para que sea tomado en cuenta por quienes tienen el control de dicho organismo político y le permitan ser el candidato a la presidencia de Benito Juárez para el 2024, municipio que por cierto recuperaron con la llegada de Ana Patricia Peralta de la Peña, quien asumió el cargo el pasado 26 de septiembre, conforme a las reglas electorales al ser la suplente de la exalcaldesa Mara Lezama, quien se separó del cargo para buscar la gubernatura, que finalmente ganó.

Partido polémico busca extender su poder

El PVEM, que ha encontrado en Quintana Roo un botín específico con negociaciones a nivel nacional, va con todo para mantener la presidencia municipal de Benito Juárez, que es su principal objetivo a corto plazo, además de, por lo menos, Puerto Morelos y Cozumel, y en esa búsqueda ya trabaja y promueve a su gente, y uno de los que está dando los primeros pasos es precisamente Gustavo Miranda García.

No obstante que todavía no son tiempos electorales, dicho partido político, que nunca se ha preocupado por seguir las reglas, ya construye el andamiaje que le pueda permitir mantener el control en Benito Juárez, que es la “joya de la corona”.

A decir del presidente del Observatorio Ciudadano, Eduardo Galaviz Ibarra, bajo estas condiciones hoy en día el PVEM no le aporta nada positivo a la democracia en Quintana Roo, sino que por el contrario, la desvía y la corrompe.

Incluso afirmó en reciente entrevista con El Despertador de Quintana Roo que el PVEM carece de principios absolutos, no tiene una estructura de valores adentro de su ideología y tampoco cuenta con una formación de liderazgos al interior, lo que se refleja claramente porque sólo buscan el poder por el poder y optan por aliarse con el partido de moda, que les garantice seguir gozando de impunidad.

Añadió además que existen personajes como Remberto Estrada Barba y el mismo Gustavo Miranda García, entre otros, que no tienen la formación política ni mucho menos una relación directa con la sociedad y a pesar de ello llegaron al poder.

Hoy éste último busca retornar al escenario político a través de la promoción que realiza su mamá, Erika García Deister, lo que les permitiría seguir ampliando los negocios que puedan hacer bajo el amparo de un puesto político que además les permita tener un mayor control del desarrollo inmobiliario, con todo y los malos antecedentes que los rodean, como es el famoso caso del “Cártel del Despojo”.

En septiembre pasado, a poco más de un año que Latinus, portal informativo con sede en Estados Unidos, exhibiera a nivel internacional el esquema fraudulento a través de demandas laborales en el que están señalados el exdirigente estatal del PVEM Luis Pablo Bustamante Beltrán —actual secretario de Desarrollo Social del Gobierno de Quintana Roo— y tres personas más que simularon ser empleados de Erika Luz García Deister, a través de García y Miranda Trading S.A. de C.V., y Operadora Turística Luz, S.A. de C.V., dedicadas a la venta de tiempos compartidos, la entonces secretaria del Trabajo y Previsión Social, Catalina Portilla Navarro, mencionó que los tres predios en litigio estaban en proceso de remate, mientras que las carpetas de investigación interpuestas por los bancos afectados seguían en proceso ante la Fiscalía General del Estado, en tanto que los involucrados se encuentran amparados.

Al respecto, se sabe que Erika García Deister se desistió de un juicio de amparo emprendido para recuperar uno de los lujosos departamentos del Condominio Maioris Towers, en la Zona Hotelera de Cancún que le fueron asegurados por la Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción de Quintana Roo, al destaparse el escándalo del “Cártel del Despojo”.

Fricciones con Morena provocarían ruptura en los estados

En las últimas semanas la alianza que mantiene el PVEM con Morena a nivel nacional se ha visto mermada desde las Cámaras del Congreso, por la discutida reforma electoral que busca imponer el presidente Andrés Manuel López Obrador.

Por ello, el pasado 29 de noviembre, de último momento, Morena decidió aplazar en la Cámara de Diputados hasta el martes 6 de diciembre la discusión y votación de dicha reforma tal y como la propone el presidente, debido a que no alcanzaría los votos suficientes para su aprobación, ante el rechazo en bloque de los partidos opositores, aunado a las fricciones que existen entre los partidos que conforman su alianza, el PVEM y el Partido del Trabajo (PT), que no están convencidos de votar a favor.

Incluso ellos piensan que existen graves riesgos aprobar la reforma impulsada por Morena, pues entre otras cosas contempla la eliminación de recursos públicos para las actividades ordinarias de los partidos políticos, lo que los dejaría en desventaja, con el riesgo mayor de perder hasta el registro como partidos políticos.

Con esa premisa es que en entidades como el Estado de México la alianza entre el PVEM y Morena ya se tambalea, y prueba de ello es que el líder estatal del Verde, José Alberto Couttolenc, declaró recientemente que podrían ir en solitario por la gubernatura en las elecciones de 2023, dejando a Delfina Gómez como posible representante únicamente de Morena y el PT.

Y justamente ese rompimiento se podría replicar en Quintana Roo en donde, si bien las elecciones locales serán hasta el 2024, el PVEM ya está moviendo sus piezas en solitario para mantener el control en municipios importantes como Benito Juárez, Puerto Morelos y Cozumel.

PVEM, tapadera de funcionarios cuestionados

Otro de los actos que evidencian la exclusiva búsqueda del poder por el poder como bandera del PVEM en Quintana Roo es que, además de traicionar a los partidos políticos con los que se ha aliado por conveniencia, han fungido repetidamente como refugio y tapadera de cuestionados funcionarios públicos, a quienes cobija para que accedan a puestos en donde puedan tener fuero, para evitar ser detenidos por irregularidades cometidas en sus anteriores encargos públicos.

Un ejemplo claro de ello es el exalcalde de Isla Mujeres, Juan Carrillo Soberanis, quien dejó a dicho municipio convertido en un literal “cochinero”, no sólo por las toneladas de basura que permanecieron por meses frente al mar, sin ser trasladadas al relleno sanitario de Cancún, sino por el desaseo financiero que abrió en las arcas municipales un boquete de más de 250 millones de pesos.

En la actualidad Carrillo Soberanis enfrenta un cúmulo de demandas en su contra por diversos delitos, entre ellos el de corrupción por su presunta participación en el desvío de recursos en obras de alumbrado público en ese municipio en 2020, por 50 millones 455 mil 471.19 pesos.

Tan sólo en julio pasado la Auditoría Superior del Estado (Aseqroo) reveló que en la Cuenta Pública Municipal 2020, su último año como alcalde, fueron detectadas irregularidades por la cantidad 91 millones 598 mil 122 pesos, ante lo cual el legislador promovió un amparo para evitar la revisión del documento.

Hoy, Juan Carrillo goza de total impunidad bajo el amparo del fuero que le permite la diputación federal que le otorgó el PVEM.

Sin dirigencia estatal, pero bajo las órdenes del “Niño Verde”

A pesar de que la nueva dirigencia del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) en Quintana Roo se definirá hasta el próximo año, militantes consultados por El Despertador de Quintana Roo afirman que por estatutos quien está al frente es el diputado local Guillermo Brahms, que es quien funge como presidente interino.

Esta versión fue corroborada por la también diputada Estefanía Mercado, integrante de la bancada del Verde en la XVII Legislatura del Congreso del Estado, en recientes declaraciones a la prensa local.

“Realmente no hay ninguna prisa por parte del partido, se están evaluando los mejores perfiles y en estos momentos la peor decisión que se puede tomar es poner a alguien que no cumpla con el perfil”, explicó la parlamentaria.

En medio de todo esto, es sabido que quien sigue controlando al partido es el propio Jorge Emilio González Martínez, alias “El Niño Verde”, cuyos intereses en Quintana Roo son muchísimos.

Cabe recordar que desde su fundación, el PVEM siempre ha estado envuelto en la polémica y ha sido controlado por la familia González Torres, que lo ha convertido en una de las más reconocidas “franquicias” de la política en nuestro país.

“El Niño Verde” ha sido uno de los personajes más beneficiados en la trama de corrupción tejida por su partido a lo largo de los años, al hacerse de propiedades en Quintana Roo bajo el amparo del poder y negocios como los casinos que posee en la ciudad y en plena zona hotelera.

De hecho, el PVEM se ha convertido en un partido protegido, primero por el PAN, luego por el PRI y ahora por Morena, lo que lo ha inmunizado ante denuncias tan contundentes como la del “Cártel del Despojo”. Otro recordado caso judicial, que fue cerrado a cal y canto, fue el del presunto suicidio de la búlgara Galina Chankova Chanev, ocurrido en Cancún, en un lujoso departamento propiedad de Jorge Emilio González, como consta en el expediente 1617/2011 que se inició en la hoy Fiscalía General del Estado.

Puestos claves de los tres Poderes, en manos de los verdes

Tanto en el Gobierno del Estado como en los municipios de Quintana Roo, como es el caso de Benito Juárez, muchos puestos importantes fueron asignados a miembros del PVEM.

Un recuento del diario Reforma detalla que las secretarías de Finanzas, Desarrollo Urbano, Desarrollo Social, Infraestructura y Trabajo quedaron en manos de miembros del Verde, subordinados a Jorge Emilio González.

Además, se establece que las secretarías otorgadas a los integrantes del Verde son las que manejan un mayor presupuesto e inciden en los asuntos fundamentales de la entidad.

Por ejemplo, Eugenio Segura Vázquez quedó al frente de la Secretaría de Finanzas. En la XVI Legislatura fue subsecretario de Servicios Administrativos del Congreso del Estado, cuando Gustavo Miranda —otro allegado a Jorge Emilio González—, era presidente de la Junta de Gobierno y Coordinación Política (Jugocopo) del Congreso de Quintana Roo. Ambos fueron implicados en la denominada trama del “Cártel del Despojo”, con fraudes inmobiliarios.

El exdirigente estatal del Partido Verde, Luis Pablo Bustamante, implicado también en temas de despojo inmobiliario, fue designado secretario de Desarrollo Social para administrar los millonarios programas de subsidio oficiales. También fue implicado en sociedad con Gustavo Miranda y Eugenio Segura.

Armando Lara de Nigris quedó como secretario de Desarrollo Urbano. Se le relaciona con Ricardo Vega Serrador, empresario gasolinero. Irazu Marisol Sarabia May funge como secretaría de Infraestructura y Transporte; antes formó parte de la XIV Legislatura, de 2013 a 2016.

La enorme influencia del Partido Verde en Quintana Roo se extiende de hecho a los tres poderes del Estado, pues además de su inclusión en el Ejecutivo en los cargos de mayor relevancia financiera, ejerce el control del Poder Legislativo —donde se autorizan, asignan y redistribuyen los recursos públicos de la entidad— a través de la Jugocopo del Congreso del Estado que preside Renán Sánchez Tajonar, al igual que del Poder Judicial, donde fue designado Heyden Cebada Rivas como Magistrado Presidente del Tribunal Superior de Justicia, quien en recientes declaraciones posteriores a su nombramiento aseguró no estar afiliado a ningún partido político, aunque su esposa, Santy Montemayor Castillo, es diputada federal por el PVEM.

*** RECUADRO ***

Militantes del PVEM que buscan candidaturas

Por Benito Juárez han alzado la mano:

  • José de la Peña Ruiz de Chávez
  • Gustavo Miranda García
  • Pablo Bustamante Beltrán
  • Ana Patricia Peralta de la Peña podría buscar la reelección

Renán Sánchez Tajonar, desde la XVII Legislatura, ya busca la candidatura del municipio de Cozumel.