MÉXICO.- Claudia Sheinbaum enfrenta un panorama económico complejo al asumir el gobierno, con varios indicadores en situación crítica. Uno de los principales retos es el déficit público, que actualmente alcanza el 5% del PIB y que el nuevo equipo económico, liderado por Rogelio Ramírez de la O, pretende reducir a 2.5% para 2025. Esto requerirá ajustes importantes en el gasto público sin afectar sectores sensibles como pensiones y transferencias sociales.

La inflación, otro desafío central, lleva más de 40 meses por encima del objetivo del Banco de México, afectada por factores externos como la pandemia y la guerra en Ucrania. Aunque se espera que la inflación regrese al 3% para 2025, analistas son escépticos. Además, los incrementos salariales han complicado el control inflacionario.

El tipo de cambio ha mostrado estabilidad, pero persisten riesgos debido a la incertidumbre económica y el déficit fiscal. Sheinbaum tendrá que garantizar confianza a los inversionistas para mantener la estabilidad del peso frente al dólar.

Otro desafío crítico es la creación de empleo formal, donde el sexenio de López Obrador terminó con cifras por debajo de las expectativas. Sheinbaum ha prometido generar 550,000 empleos en su primer año, apoyándose en proyectos de infraestructura.

A pesar de estos retos, hay aspectos positivos en el comercio exterior, donde México se ha consolidado como el principal socio comercial de Estados Unidos, beneficiado por las tensiones entre China y Estados Unidos. La inversión extranjera directa también muestra potencial, aunque predominan las reinversiones sobre nuevas inversiones. (Con información de Expansión)