WASHINGTON.- El 60% de los votantes estadounidenses considera que separar a los hijos de los padres que cruzan la frontera sur sin documentos es una violación de los derechos humanos, de acuerdo con una encuesta de la Universidad de Quinnipiac.

El sondeo destacó en cambio que 36% piensa que no es una violación de los derechos humanos.

No obstante, una abrumadora mayoría, 83%, opina que el gobierno del presidente Donald Trump tiene la responsabilidad de reunificar a estos niños con sus padres.

Las palabras más utilizadas por los encuestados para describir la política de separación de familias inmigrantes son “triste”, “terrible”, “malo” e “incorrecto”. De hecho, las 18 palabras más frecuentemente utilizadas en una pregunta abierta sobre la separación de familias son todas negativas.

De acuerdo con Tim Malloy, subdirector de encuestas de Quinnipiac, las opiniones de los estadunidenses constituyen “un golpe al vientre de la política de inmigración del presidente Donald Trump”.

Además, al contrario de las implicaciones constantes de Trump, el 69% de los votantes considera que los inmigrantes indocumentados no son más propensos que los ciudadanos estadunidenses a cometer delitos, frente al 25% que cree que sí lo son.

Los votantes estadunidenses desaprueban en general la forma en que el presidente Trump maneja el tema de la inmigración, en un porcentaje de 58% frente al 39%.

Casi la mitad de los estadunidenses, 49%, piensa además que Trump es “racista”, frente al 47% que opina lo contrario.

Asimismo, la mitad exacta de los estadunidenses cree que el motivo principal de las políticas de inmigración de Trump es “un interés sincero en controlar nuestras fronteras”, mientras que 44% dice que el motivo principal son “creencias racistas”.

Un 55% desaprueba su labor al frente de la Casa Blanca en tanto que 40% lo aprueba.