El dirigente del deporte nacional, Alfredo Castillo, justificó con los resultados de los JCC Barranquilla 2018 que México tiene bases sólidas y sólo la continuidad asegurará el éxito en la próxima justa panamericana

Alfredo Castillo Cervantes, titular de la Comisión Nacional del Deporte y quien dejará el cargo en diciembre próximo, expuso que México alcanzó cifras históricas en los Juegos Centroamericanos y del Caribe Barranquilla 2018, nunca antes vistas en 52 años de histoaria del deporte nacional, por lo que es un hecho que hay bases sólidas e instó a la nueva administración —que asumirá la senadora Ana Gabriela Guevara— a dar continuidad a los programas establecidos, si se aspira al éxito en los Juegos Panamericanos de Lima 2019.

“Las exigencias que vienen ahora con los resultados obtenidos (Barranquilla 2018) será en los Juegos Panamericanos, las cuales ya están proyectadas en el número de eventos clasificatorios de preparación y campamentos, van a ser muy importantes”, reconoció Castillo en conferencia de prensa celebrada en Los Pinos y en compañía de Eduardo Sánchez, vocero de la Presidencia de la República.

En la justa regional en Barranquilla 2018, México ganó 132 medallas de oro, 118 de plata y 91 bronces; con ello superó por 30 de primer lugar a Cuba, su más fuerte rival en el área.

Sin embargo no fue todo, de los 672 deportistas con los que asistió México, 412 fueron debutantes, lo que equivale al 62 por ciento del total de la delegación deportiva. Se consiguió medalla de primer lugar en 17 disciplinas y de las 37 disciplinas en las que se participó México, en todas de consiguieron medallas; las excepciones fueron el beisbol y basquetbol. Además se rompieron 25 records nacionales. El 30 por ciento de los medallistas entrenaron en el CNAR, por lo que debe ser el sitio ideal del Alto Rendimiento.

Por esos antecedentes inmediatos, Castillo Cervantes invitó a su futura sucesora, Ana Gabriela Guevara, a involucrarse cuanto antes en el trabajo de planeación de cara a los próximos Juegos Panamericanos de Lima 2019, que serán del 26 de julio al 11 de agosto, al considerar que dos meses de planeación pueden ser determinantes en los resultados de esos Juegos.

“Existe el riesgo que con el cambio de administración, el reacomodo y la resistencia propia de las federaciones, institutos y comité no haya continuidad, y no habría un buen resultado. “Se hizo lo humanamente posible con pocos recursos, si no hay continuidad, hay que volver a empezar”, advirtió el dirigente del deporte nacional.