En conferencia de prensa, luego de su reunión con su gabinete de Salud, Andrés Manuel López Obrador difirió de la opinión de los hermanos Tatiana y Manuel, hijos del legendario panista Manuel  ‘Maquío’ Clouthier sobre el nombramiento de Manuel Barttlet Díaz al frente de la CFE. AMLO fue muy claro al respecto: dijo que respeta la opinión de Tatiana y de todas las personas, pero que no la comparte.
Esta diferencia de criterios y defensa de prestigios y de honras no sería inusual si Tatiana no hubiera jugado un papel tan importante en su campaña electoral, donde fue una aguerrida coordinadora y vocera. El asunto es que Manuel  Clouthier Jr. y su hermana han insistido en diferentes foros y en medios de comunicación en que ‘Barty’ fue un represor y perseguidor de la entonces oposición que encabezó su progenitor. “El Bartlett de AMLO es el mismo que como Segob mandó reprimir las empresas de mi padre Maquío,  invadía las tierras agrícolas de su campo, lo difamaba a través de pasquines del PLM y por si fuera poco se robó la elección de 1988”, dijo el el excandidato independiente al Senado de la República por Sinaloa al referirse al ex titular de Gobernación, señalado como responsable de “la caída del sistema” del proceso electoral en el que Carlos Salinas de Gortari, asumió la Presidencia de la República.
López Obrador realizó una entusiasta defensa de ‘Barty’, dijo que siempre se toman las cosas malas y no las buenas de las personas, dado que en su opinión el funcionario lleva 15 años defendiendo la energía eléctrica, pues desde 1992, siendo senador se opuso, según esto, a la modificación de una ley secundaria que propuso Salinas de Gortari para privatizar y desmantelar la industria eléctrica nacional. Básicamente le lavó el pasado, lo emancipó, le dio reset.
No fue suficiente la defensa a ultranza, el presidente electo Andrés Manuel López Obrador aprovechó la oportunidad para refrendar su compromiso de campaña de no aumentar los precios de la gasolina, el gas ni la luz, es decir, sostuvo que no van a subir más allá de la inflación mientras dure su mandato. Suponemos que mientras San Bartlett esté al frente de la corrupta CFE, por decir algo.
Como dijo doña Esa: “Déjalo Chuli, poner a Bartlett en la CFE es como poner la Iglesia en manos de Lutero”.  ¡¡Me caigo al mar!!