Canto del Gallo
3 Ago. 2018Continúa la resistencia a la descentralización de las secretarías federales que dispuso vía decreto pre tempore el presidente electo López Obrador. Resulta que el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Sectur rechazó categóricamente el cambio de sede de la dependencia, es decir, que no se moverán de la CDMX para mudarse a Chetumal, Quintana Roo.
El líder de ese sindicato, José Carlos Navarro, fijó firme postura de rechazo alegando “fuertes afectaciones”, “tenemos madres solteras, esposas y esposos en la iniciativa privada o hijos estudiando”, habrá además otro tipo de afectaciones, desde cambios culturales y de climas extremos hasta de usos y costumbres. “No tienen idea las autoridades electas ni siquiera de cuántos trabajadores tenemos”, dijo.
La Sectur, en las oficinas centrales, cuenta con mil 154 trabajadores de base y alrededor de 500 de confianza, y el sentir general es de total rechazo. Se ve venir que, de ser necesario, se ampararán, se irán a huelga y organizarán marchas de resistencia al cambio.
Como dice doña Esa: “A ya sabes quién le pasará ya sabes qué, con ya sabes quién”; está montado en su macho, entercado y no cede a las presiones; ahí está la de Tatiana y Manuelito Clouthier contra San Bartlett, a la que ya se sumó la Coparmex. Ave María Purísima.
Gallo Giro
Hemos insistido en que el uso y abuso del teléfono celular, aunado al internet móvil, es un fenómeno muy dañino para la salud mental y física de los individuos y aun más para los jóvenes y niños; pues resulta que el parlamento de FRANCIA aprobó el lunes pasado de forma definitiva la prohibición de su uso en primarias y secundarias de todo el país.
Especialistas determinaron que este fenómeno conduce a un proceso degenerativo en el desarrollo de la población, principalmente de los jóvenes estudiantes. El presidente Emmanuel Macron lo prometió en su campaña electoral y hoy es una realidad. La excepción para el uso de los smartphones en las escuelas es únicamente para fines pedagógicos y para niños con discapacidad.
Como dice doña Esa: “Es que ahora, Chuli, hasta para ir al baño a hacer del cuerpo, en lugar de llevar un cigarro, llevas tu celular”, tienen razón los franceses. Me caigo al mar.