VIENA.- Una pareja de cisnes fueron trasladados de un lago de Austria después de sus ataques aves a todo humano que osara acercarse a su nido de amor, y al fruto de sus desvelos, un vaso de plástico que cuidaban como si fuera su retoño. Según explica la revista Sciente Alert, lo interesante del caso es que se trataba de dos cisnes macho que habían formado un vínculo inseparable para proteger un nido imaginario en el que vivía un patito feo muy acorde con los tiempos: un vaso de plástico multicolor.