WASHINGTON.- Las lluvias de meteoros, comúnmente conocidas como lluvias de estrellas, se forman cuando la Tierra atraviesa restos de polvo y rocas de cometas o asteroides. Sin embargo, podríamos presenciar un fenómeno único en el futuro: la primera lluvia de meteoros creada por el ser humano, conocida como las dimórfidas.

El origen de esta posible lluvia estelar es el impacto de la misión DART de la NASA contra el asteroide Dimorphos en 2022. La misión tenía como objetivo desviar un asteroide potencialmente peligroso, y fue un éxito. Sin embargo, el impacto dejó escombros que podrían cruzar nuestra atmósfera en unos años.

Un equipo de científicos españoles e italianos ha simulado el comportamiento de estos escombros utilizando supercomputadoras. Han descubierto que las partículas más pequeñas podrían llegar a la Tierra en solo siete años. A pesar de esto, estas partículas podrían no ser lo suficientemente grandes para crear meteoros visibles a simple vista.

Si las partículas más grandes y lentas también llegan a nuestro planeta, podríamos ver una lluvia de estrellas visible. Esto requerirá futuras campañas de observación para confirmar si las dimórfidas iluminarán nuestros cielos. De ser así, sería un evento sin precedentes: la primera lluvia de estrellas creada artificialmente. Aunque quizás no sea la última, dado que otros impactos futuros podrían producir eventos similares. (Con información de Hipertextual)