El ego de Ricardo Ferretti le impide tomar las riendas de la Selección Nacional. No que lo
tenga muy alto, al contrario, el entrenador brasileño está satisfecho con su carrera.
El «Tuca» será el técnico interino del Tricolor para los amistosos de la Fecha FIFA,
ante Uruguay y Estados Unidos. Nada más.
La única forma de que Ferretti firmara el contrato con la Federación Mexicana de
Futbol es que Tigres lo libere de su cargo en el banquillo felino.
«Tengo un contrato, que acabo de firmar, para quedarme [en Tigres] tres años más. Ustedes
saben que tener continuidad en un equipo del futbol mexicano es casi imposible», dijo el
«Tuca» en la conferencia de prensa de su presentación como interino.
Al término del contrato con el club regiomontano, el veterano estratega cumpliría 11 años
en el banquillo. Su meta ideal, en lugar de dirigir al combinado tricolor en la Copa del
Mundo Catar 2022.
Sí, debe pensar en el Tri
El brasileño no tiene planeado a futuro sentarse en un estadio del Medio Oriente. Recordó
que ya estuvo en un Mundial, en Estados Unidos 1994, como asistente de Miguel Mejía
Barón, y no necesita estar en otro. «Cada quien tiene un grado de ego».
Lo que sí le mueve a Ferretti es la crítica. Por lo que estar en el cargo más caliente del
balompié nacional no le incómoda.
«En 28 años [como entrenador] he sabido vivir con las críticas. Yo leo las críticas pero sé
quiénes, cómo y por qué las hacen. Pero sí yo voy a protestar cada una, me volveré loco».
En 2019, llegaría el entrenador para la Copa Oro y el proceso para las eliminatorias rumbo
a Catar. Sea quien sea, Ferretti le dará el punto bueno y se dedicará a apoyar.