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PEKÍN.- En un insólito giro de los eventos, un tribunal en Yancheng, China, subastó el último bien de un multimillonario declarado en quiebra: una botella de Sprite. El refresco, que normalmente cuesta 6 yuanes (9 céntimos de dólar), fue subastado en la plataforma judicial Taobao de Alibaba con una puja inicial de 4,2 yuanes.

A pesar de ser un objeto común, la subasta atrajo a 366 interesados, y la botella fue finalmente adquirida por 4,8 yuanes. Sin opción de envío, el comprador deberá recoger la botella en persona.

El propietario del refresco había sido parte de dos empresas: una de biotecnología y otra de alimentos marinos, con un capital combinado superior a 1,7 millones de dólares. Ambas empresas se declararon en bancarrota tras múltiples litigios y sanciones, principalmente por incumplir regulaciones medioambientales.

Curiosamente, esta no es la primera vez que el tribunal de Dafeng realiza subastas de objetos cotidianos. Entre los artículos subastados previamente se encuentran una taza, destornilladores y un matamosquitos eléctrico, todos vendidos sin contratiempos.

Este inusual caso pone en perspectiva las dramáticas caídas financieras que pueden afectar incluso a los multimillonarios, mostrando que, a veces, lo único que queda es lo más inesperado: una botella de Sprite.