WASHINGTON.- La guerra verbal sobre los precios del petróleo entre el Presidente estadounidense, Donald Trump, e Irán continúa. En su arrebato más reciente, Irán le dijo a Trump que deje de tuitear.

“Sus tuits han elevado los precios al menos 10 dólares el barril”, dijo el gobernador iraní de la OPEP, Hossein Kazempour Ardebili, en un mensaje a Trump difundido por el servicio de noticias Shana del Ministerio de Petróleo iraní. “Por favor, pare, de lo contrario subirán aún más”.

Trump dijo previamente por Twitter que la Organización de Países Exportadores de Petróleo está “haciendo poco por ayudar” a reducir los costes de la gasolina y que “en todo caso, están impulsando aún más los precios”.

“Está arremetiendo contra buenos individuos de la OPEP”, dijo Kazempour. “En realidad los está desacreditando y socavando su autoridad, esperamos que sea más educado”.

Este jueves Trump volvió a dirigir sus incendiarios tuits a la OPEP, a la que ordenó que “bajara los precios ahora”. El presidente republicano lleva semanas criticando al grupo petrolero.

Finalmente, Arabia Saudita redujo ayer mismo los precios para las ventas de agosto a Asia de su petróleo ligero en tanto el mayor exportador de crudo del mundo aumenta su producción para asegurar a los compradores de que hay suficiente oferta.

El petróleo extendía sus pérdidas luego que la estatal Saudi Arabian Oil redujera la mayoría de los precios para los mercados asiáticos, europeos y estadounidenses.

La compañía, conocida como Saudi Aramco, redujo sus precios oficiales de venta de crudo árabe ligero para los compradores en Asia a mil 90 dólares el barril por encima de la referencia de Medio Oriente, informó la compañía el jueves en una lista de precios enviada por correo electrónico.

La reducción de 20 centavos fue la primera rebaja en cuatro meses desde la más alta desde julio de 2014 y coincidió con las expectativas de cuatro operadores en una encuesta de Bloomberg.

Los mayores precios de la gasolina podrían crear un problema político a Trump de cara a las elecciones legislativas de noviembre, al eclipsar las afirmaciones de los republicanos de que los recortes de impuestos y la eliminación de normas federales han ayudado a impulsar a la economía local.